SAN SALVADOR.- Ocurrió este jueves por la madrugada en una casa del barrio “40 viviendas”. Los perros ladraban, los chicos sintieron miedo. Se les levantó el piso del baño y se rajaron las paredes. El tremendo susto de una familia.
Zulma de Vega, la dueña de casa, le contó a Mercurio Noticias el mal momento que pasaron en la madrugada de este jueves en su casa, ubicada en el barrio “40 viviendas” de San Salvador.“No nos explicamos que es lo que pudo haber pasado. Estábamos durmiendo como todas las noches y empezamos a sentir unos ruidos, pensamos que era una rata que andaba por el cielorraso, y lo dejamos pasar. Después a los cinco o diez minutos volvió a pasar lo mismo, se le levantó un hijo nuestro y nos dijo que le vibraba la pared y el respaldo de la cama. Lo tratamos de tranquilizar y le dijimos que no pasaba nada”, comentó la señora.Y continuó: “Tengo un gato, que intenté sacarlo de la habitación y no quería salir. Se aferraba. Y la perra era como que me quería avisar algo. Ladraba, lloraba y rasguñaba el ventanal (para entrar)”.Posteriormente, “volvimos a sentir el ruido y se levantó el padre de los chicos y nos encontramos con el panorama ese en el baño. No sabemos a que se debe. Tenemos ganas de llamar a la Municipalidad para ver si nos podrían dar una respuesta porque es un barrio nuevo, no es una casa precaria”.Incluso, indicó que “los cuadros de la cocina estaban torcidos”, además de rajaduras en las paredes.“Estoy asustada pero no voy a bajar los brazos, buscaremos una explicación para que alguien nos pueda dar una mano”, afirmó Zulma.Asimismo, indicó que a los otros vecinos no les ocurrió este suceso, lo único que le llamó la atención a una vecina que su perra también estaba nerviosa, tal como el animal de la damnificada. Fuente: Reporte Cuatro.
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