Gustavo Grinóvero será operado de ambas piernas en las próximas horas

Luego del gravísimo accidente protagonizado por el ex piloto y preparador de autos de carrera de Fórmula Entrerriana (foto), éste se encuentra internado en el Instituto de Traumatología de Paraná. Grinovero chocó con el auto de carrera de Luis Scopeta contra una camioneta mientras lo probaba en la ruta 32, en cercanías de Viale.
En declaraciones a la prensa Grinovero dijo que “El viernes a primera hora de la tarde, cuando llegué al Instituto, me operaron del brazo y de la muñeca que los tenía fracturados: me pusieron dos clavos y una serie de limpieza en las heridas de las piernas, que se encuentran ambas quebradas en tibia y peroné. La derecha presenta una fractura externa, es la que más complicada está, pero por suerte aparentemente está todo bien, se limpió todo. Así que ahora estoy haciendo reposo con las piernas colgadas en las pesas. Este lunes estuvieron haciéndome radiografías en una de mis piernas, mostró que tiene mis huesos bien alineados y que ya estaría lista para ser operada, mientras que a la otra le faltaría más tiempo, en tanto que mañana miércoles estarán llegando al Instituto todos los clavos y todo lo necesario para hacer la operación. Igualmente, los médicos no quieren apurarse por miedo a alguna infección”, comenzó diciendo Gustavo Grinóvero, quien al momento agregó que lo que le sucedió puede considerarse como una desgracia con suerte: “Fue con mucha suerte, vengo haciendo estas tiradas hace veinte años en la ruta y a veces cuando había mucho tráfico como yendo hacia Diamante, sobre todo de camiones, cargábamos el auto y volvíamos a hacer los trabajos al taller. Sin embargo, uno siempre está ahí, atento y con todos los medios de seguridad, pero a veces el exceso de confianza te juega una mala pasada. Casi siempre somos dos o tres los muchachos que probamos, en ese momento las rutas estaban cortadas, ya habíamos hecho cinco o seis tiradas con el auto en buen funcionamiento y, en una de las últimas que hago, veo a una camioneta que viene por la ruta desde el acceso de Viale; ese muchacho de la camioneta frena, yo paso, pero más adelante veo a la camioneta roja que choqué. Fue cuando iba a hacer el cruce en la rotonda, ahí la camioneta se mandó para Viale, por lo que atiné primero a esquivarla, como me di cuenta de que no podría, segundo apunté a pegarle en una de sus ruedas porque, al ser una camioneta de esas Ford de los ’80, que son puro fierro, te metés abajo y no contás el cuento. No sé si fue suerte, casualidad o instinto, pero mi única reacción cuando me di cuenta de que no podría evitar la colisión fue apuntar a una de sus ruedas para que amortiguara el golpe”. Fuente: Talcual y FM Libertad de Chajarí