El jefe departamental de Policía de Villaguay, comisario mayor Sergio Schneider sostuvo que “habrá que salir a los tiros” para lograr la detención y el procesamiento de los delincuentes, en referencia a los casos de abigeato en la zona. “Si es necesario salir a los escopetazos, habrá que hacerlo”, subrayó, en una entrevista radial.
Consultado acerca de las reiteradas denuncias de vecinos de zonas aledañas al arroyo Villaguay por el robo de sus animales, Schneider aclaró que “la Brigada de Abigeato ya no depende de la jefatura local, sino de la Dirección de Delitos Rurales con asiento en la ciudad de La Paz”.
Más allá de esta cuestión, afirmó: “Nosotros seguimos asistiendo al vecino porque él no tiene la culpa. Recibimos las denuncias, vamos al lugar del hecho y prestamos asistencia, pero es algo cuya prevención e investigación depende de otros”.
En referencia a los robos acontecidos en los últimos meses en inmediaciones de la reserva “La Chinita”, dijo que “pasa cada vez que llueve, cuando la zona se torna inaccesible para el móvil de la Comisaría 1ª”.
El jefe policial opinó que “en Villaguay debería haber otra Brigada, porque es un departamento muy extenso y la vegetación colabora a favor de los delincuentes”. “Se esconden en los espinillos y renuevos, y como hay mucha hacienda, acá ser cuatrero es muy fácil”, consideró.
Para el comisario, hay que extremar medidas: “Si es necesario salir a los escopetazos limpios, habrá que hacerlo, porque en algún momento esto tiene que terminar. Lo digo tanto por el propietario como por el que está haciendo prevención”.
“De alguna manera habrá que lograr la detención y el procesamiento. Habrá que salir a los tiros, no digo con balas de plomo, pero la bala de goma es un elemento que está absolutamente autorizado para este tipo de procedimientos”, especificó.
El “mercado del robado”
Schneider destacó los allanamientos realizados en viviendas de la zona con resultado positivo, pero apuntó que “la carne se roba para comercializar, porque hay vecinos que compran”.
“Mientras haya un ‘mercado del robado’, esto seguirá existiendo. El ladrón sale a levantar pedidos, hace la venta primero para luego poder sacarse de encima rápidamente el producto robado”, explicó.
“Pasa lo mismo que con otros hurtos, y existe una complicidad de la persona que compra los elementos robados, porque nadie puede argumentar que compra de buena fe un televisor en cien pesos, una bicicleta en 30, o un kilo de carne a 4 pesos”. Fuente El Pueblo.
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